En el artículo de hoy vamos a hablar de caballos dorados como el champán. Y la comparación les va al pelo, nunca mejor dicho, ya que el gen que vamos a descubrir en este artículo se llama, precisamente, Champagne. ¡Algunos parece que tengan hasta las burbujas! Antes de nada os recomiendo, como siempre, que tengáis claras cuáles son las capas base de los caballos. Si no estáis muy seguros, podéis echar un vistazo a este artículo. El Champagne es un gen independiente de las demás diluciones que hemos visto, aun así, creo que será más fácil de entender si antes has leído el artículo acerca del Cream. No es indispensable, puedes seguir la lectura de este artículo sin leer antes el del Cream, pero hay ciertas comparaciones en los matices que puede resultar interesante comprender. Y si aún tienes ganas de más, leyendo este artículo acerca del perla te ayudará aún más a completar la información. Vamos a dejarnos de rodeos y hablemos del champán. Como ya habréis podido deducir, el gen se llama Champagne, y se llama así precisamente por el parecido que estos caballos presentan con esta bebida. No está presente en todas las razas, por ejemplo los caballos españoles (PRE, asturcón...) no lo tienen. Estos caballos tienen ciertas características en común: la capa tiene un tono dorado, que variará desde un dorado clarito hasta uno muy tiznado, casi gris, y tiene un brillo peculiar, casi metálico, en muchas ocasiones, que puede recordar mucho al perla. Crines y cola también se afectan, aunque las que son "originalmente" negras (es decir, en caballos con base negra o castaña) suelen quedar muy oscuras. La piel es de color rosa, pero ojo, no es rosa clarito como puede ser un doble crema: se trata de un color rosa palo, más oscuro, muchas veces casi gris, y que de forma característica presenta pecas: la piel champán es moteada, y se ve especialmente bien en el hocico, alrededor de los ojos y en la zona perineal. Las pecas pueden ser desde un rosa más oscuro que el resto de la piel hasta prácticamente negras; si la piel de "base" es de un tono muy oscuro es posible que no las podamos distinguir si no nos fijamos bien. El color de los ojos es un tono miel-avellana dorado, a veces verdoso, en ocasiones azulado o grisáceo, y con frecuencia también tiene el iris moteado. A veces puede crear confusión por su parecido con el doble perla, sin embargo hay diferencias. El caballo doble perla tiene la piel rosa oscuro, a veces incluso violáceo oscuro, pero muy rara vez tiene pecas, y si las tiene, son pocas; tiene un tono más uniforme. En cambio el champagne tiene en general la piel rosa palo y muy pecosa, aunque si se juntan muchas pecas puede parecer que la piel es más oscura. Los ojos pueden ayudarnos también, ya que aunque el doble perla puede presentar la misma gama de colores que el champán, el iris moteado es más típico del champagne. En cuanto al color de la capa en sí, generalmente el perla es más tostado y el champán es más dorado, pero como ocurre con todas las demás capas, los hay claros y los hay oscuros, y a veces pueden coincidir tonalidades. En cualquier caso, si tenemos dudas, podemos hacer un test genético para averiguar los genes. El champán es un gen dominante simple, que se representa con las letras Ch. Cuando no hay champán es nn (aunque a veces se representa como chch, todo con minúsculas), si hay una copia es nCh y si tenemos las dos copias es ChCh. El hecho de que sea dominante simple quiere decir que el caballo sólo necesita tener una copia del gen para ser champán, y el efecto de tener una o dos copias es el mismo. Aquí encontramos una diferencia con el Cream, que si recordáis, en función de si hay una o dos copias diluye más o menos (castaño + nCr es bayo, castaño + CrCr es perlino), y con el perla, que necesita las dos copias para hacer efecto (prlprl). En este caso, el champagne es capaz de hacer la dilución completa en solitario, no necesita tener dos copias para ejercer el efecto máximo. Por tanto, un caballo nCh y otro ChCh van a tener la misma dilución. Dependiendo de si el champán actúa en una base o en otra tendremos diferentes tipos de champán. Si el caballo es de base alazana, es un champán dorado. Se parece mucho al palomino, pero recordemos: piel rosa oscuro con pecas, ojos avellana-miel o verdosos, y generalmente moteados, aunque a veces las diferencias son tan sutiles que puede confundirse fácilmente con un palomino. Si la base es castaña, se llama champán ámbar. El cuerpo es dorado y las crines y cola son más oscuras, con un color que puede ir desde un anaranjado oscuro hasta casi negro. Las patas del champán ámbar también se ven diluídas, hasta el punto de que muchas veces la diferencia de color entre lo que sería la "zona negra" y la "zona roja" de un caballo castaño, en el champán ámbar puede ser difícil distinguirlo. Por norma general la zona que hubiera sido negra es más grisácea, pero no siempre ocurre. Y si la base es negra tenemos el champán clásico. El color de un champán clásico es un color de oro viejo, casi gris, negruzco. Crin y cola tienen una tonalidad similar, aunque con frecuencia son algo más oscuras que el cuerpo. A veces se usa también el término champán sable para referirse a los champán ámbar que retienen un tono mucho más oscuro en las patas y en las crines que en el cuerpo, sería el equivalente al bocifuego. Al igual que el bocifuego es genéticamente un caballo castaño, pero con una tonalidad muy oscura, el champán sable es un caballo champán ámbar más oscuro. En algunas ocasiones es difícil de distinguir de un champán clásico, y puede que sólo un test genético nos ayude a diferenciarlos. Al nacer, los potros tienen la piel muy sonrosada y los ojos suelen ser azules. Poco a poco irán adquiriendo la tonalidad que tendrán de adultos. Como curiosidad, cuando el champán se da en caballos de base negra no es raro que aparezca un efecto que se llama "rodaduras inversas", "reverse dappling" en inglés. Tal como el nombre sugiere, se trata de la aparición en la capa de marcas como rodaduras, pero más oscuras en lugar de más claras. A veces muy sutiles, a veces más marcadas. No es exclusivo de los champán clásicos, ni de los champán en general, pero en esta capa es relativamente frecuente. Tal y como os adelantaban las fotos de los potros, el champán puede combinarse con otros genes: crema, dun, silver (que ya lo veremos), y también con patrones blancos como tobiano, sabino, overo frame... Y también con tordo. En el caso de las combinaciones con genes de dilución, el color resultante es una mezcla entre ambas diluciones. En el caso de los patrones blancos (Puedes ver estos artículos: el-kit-de-las-manchas.html, los-caballos-overos-mas-manchas-para-la-coleccion.html, los-appaloosa-esos-caballos-con-pecas.html) al igual que con el resto de las capas, el champagne sólo afectará a las "manchas de color". Y el tordo, como ya vimos en este artículo, irá progresivamente aclarando el color de la capa después de haberla intensificado durante los primeros meses o años de vida del animal. Voy a meterme un poco con la combinación champán y crema, ya que sus efectos son más o menos similares y cuando se combinan puede ser confuso saber cuál es cuál. Cuando el champán se combina con doble crema es más sencillo, pues ya el caballo tendrá la piel rosa clarito y ojos azules. El champán diluye, pero el doble crema ya está muy diluído y no va a poder actuar mucho más. Es posible que si nos fijamos bien en la piel o en los ojos haya algunas pecas o moteados sutiles, pero generalmente tendremos que testar para saber si además de doble crema son champán. La complicación está en cuando se combina un crema sólo con el champagne, ya que aquí entra en juego bastante la percepción de las tonalidades del color. Un caballo con 1 crema + champán (nCr ChCh o nCr nCh) tendrá las características que hemos descrito antes, pero con el color del cuerpo algo más cremoso. Recordaréis que el crema cuando está en heterocigosis (nCr) no es capaz de actuar en el negro; pues bien, cuando se combina con el champán sí aclara un poquito, así que el champán clásico con un crema tiene un color también algo más cremoso que el champán clásico sin crema. Los ingleses no se complicaron mucho a la hora de nombrar estas capas, y las llamaron champán dorado crema o palomino champán cuando la base es alazana, champán ámbar crema o bayo champán para la base castaña (o champán sable crema para los muy oscuros), y champán clásico crema o negro ahumado champán cuando la base es negra. En el caso de los doble crema + champán es más fácil aún: cremello champán, perlino champán y crema ahumado champán respectivamente. Con dun (puedes ver el artículo del dun aquí) ocurre algo similar: el color del cuerpo se aclara un poco, hay marcas primitivas... Y los nombres tampoco están muy rebuscados: grullo champán o champán clásico dun cuando la base es negra; champán ámbar dun para base castaña, y champán dorado dun para base alazana. Es difícil diferenciar un champán de un champán combinado con doble perla, ya que el efecto de ambos genes es muy similar y se superponen. Es una combinación muy rara, por la prevalencia de los genes perla y champán, pero puede ocurrir; si tenemos un caballo que tiene posibilidad de haber heredado ambos, lo mejor es testar. Cuando se combina con un perla único (nprl) el efecto es el de champán únicamente, el perla permanecerá "oculto". Por último, os dejo más fotos de caballos champán, no pensaba poner tantas, pero al final gracias a la amabilidad de estas personas he conseguido un montón de preciosas fotos y no podía no ponerlas... ¡Disfrutad! ¡Hasta el próximo artículo!
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Un poco sobre mí
Me llamo Silvia Pérez, y desde siempre he sido una apasionada de los caballos y sus capas. Categorías
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Abril 2020
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